lunes, 4 de abril de 2011

CAPITALISMO Y SOCIALISMO ¿ECOLÓGICOS?

Según Hugo Chávez “no sería extraño que en Marte haya habido civilización, pero a lo mejor llegó allá el capitalismo, llegó el imperialismo y acabó con ese planeta". Luego, exhorta a seguir un patrón "socialista" de consumo: más comedido y ecológico.

Pero detrás de esa supuesta ironía –suponiendo que es eso- surgen las dudas ¿Qué es un patrón socialista de consumo comedido y ecológico? ¿Han sido más ecológicos los proyectos socialistas? ¿Es ecológico el ideario socialista?

Si uno analiza los orígenes del socialismo, en torno a los cambios sociales que la Revolución Industrial generaba en la sociedad, la cuestión ecológica era una idea prácticamente marginal. En términos estrictos, la crítica al modo de producción capitalista se realiza dentro de los propios marcos de la ilustración racionalista.

Incluso los promotores del socialismo originario, como Fourier o Robert Owen, no se oponían al desarrollo industrial y productivo.  Mucho menos lo hacía Saint Simon. Tampoco Marx aborda el problema ecológico como eje central en su teoría (aunque algunos dicen que sí). No obstante, en general no existía conciencia de la necesidad de cuidar el medioambiente.

En la actualidad, la mayor parte de la discusión en torno a temas medioambientales parece basarse en la idea de que el “socialismo”, por si mismo, es más ecológico que el “capitalismo”. Pero ¿Qué hay de cierto en ello?

Hay varios supuestos –ilusorios- que se desprenden de lo anterior, como por ejemplo, que el carácter colectivo de un bien es más efectivo -que el carácter privado- a la hora proteger el medio ambiente o el ecosistema; o que las empresas estatales son más responsables que las privadas con el entorno natural. Ejemplos que contradicen estos supuestos hay muchos, tanto en otros países como en Chile.

Todas estas ideas se basan en una dicotomía ficticia y errada, que supone que los agentes del campo corporativo están desligados de los agentes del campo estatal; o que los últimos son más responsables con el medio ambiente que los primeros, sobre todo cuando el Estado se alza como único monopolio productivo e industrial.

Algunos dirán que la diferencia radica en la visión con respecto a la producción, que el capitalismo da prioridad a la acumulación, mientras que el socialismo al interés colectivo y humano.

Dicotomía falsa, porque tanto lo que se llama habitualmente el modelo industrial capitalista –crony capitalista o mercantilista- como el modelo industrial socialista –de economía planificada y estatal- mantienen o han mantenido como eje central de sus sistema económicos, la expansión productiva a gran escala –al costo que sea- y cuyo trasfondo es el Estado como promotor -encubridor-. El mejor ejemplo de esto, es la producción armamentista, la carrera atómica y espacial durante la Guerra Fría, que ambas potencias desarrollaron a niveles extremos. Eso sin mencionar el secretismo a costa de la vida y seguridad de las personas.

Algunos dirán que comparativamente las potencias ricas de Occidente –sin mencionar China obviamente, el segundo emisor de dióxido de carbono en el mundo- han sido más depredadoras y desconsideradas con el medio ambiente a lo largo de los siglos en todo el mundo. Nadie discute eso en realidad. Pero, ese hecho no hace más ecológicos a los estados socialistas o los países pobres, sólo menos depredadores. Y hasta por ahí.

Porque más allá de una apreciación netamente ideológica, una cosa es el compromiso con el ecologismo, y otra es que la economía de un Estado se deprima, haciendo que su expansión productiva e industrial se detenga o disminuya junto con su consumo interno, disminuyendo con ellos sus pretensiones de poder.

Eso no es ecologismo ni compromiso con el medio ambiente, es pobreza. Y está demostrado que una economía empobrecida tampoco es ecológica.  

La única idea que podría ser más ecológica y a la vez socialista, podría ser la que proponía Henry David Thoreau en Walden o la vida en los bosques.

¿Por qué entonces Chávez habla de un socialismo comedido y ecológico desde su puesto estatal y de poder? ¿A qué refiere específicamente?

3 comentarios:

Luis Pablo dijo...

Gracias por estos espacios de conocimiento, me parece que me da un mejor panoráma de lo que estoy buscando, pero sé que lo que encontraré son más preguntas que respuestas. ¿Que horizonte nos depara el juego sistema-mundo?, ¿Quienes ganarán la batalla?, ¿hay una lucha?, como dice su persona y el economista Wallerstein, precisamente porque no sabemos hacia dónde vamos, se necesita de el conocimiento, la praxis y la imaginación, la creatividad humana para la intervención. Y lograr cambios graduales, incrementales y pacíficos.

Luis Pablo dijo...

Gracias y saludos.

Jorge A. Gómez Arismendi dijo...

Hola Luis Pablo, gracias por visitar el blog. La idea es compartir ideas, debatir y sobre todo tener nuevas preguntas.

No existe un manual con respuesta para todo, por eso es bueno abrir la mente y evitar caer en la fatal arrogancia...

Saludos